En 1979 Victoria Eva y Anatole Boris fueron localizados por el Comité de Defensa de los Derechos Humanos del Cono Sur (Clamor), dependiente del Arzobispado de San Pablo, Brasil, mientras se encontraban viviendo en Chile junto a una familia de esa nacionalidad. Esta familia había solicitado la adopción luego de que los niños fueran abandonados en una plaza de Valparaíso en diciembre de 1977. Anatole y Victoria continuaron viviendo con su familia adoptiva pero en contacto con sus familiares biológicos. Sus padres continúan desaparecidos.
Victoria Eva Julien Grisonas
- Localización: 1 de enero, 1979
Victoria Eva Julien Grisonas nació el 9 de mayo de 1975 en la ciudad de Buenos Aires. Fue secuestrada junto con su madre, Victoria Lucía Grisonas, y su hermano, Anatole Boris, el 26 de septiembre de 1976 en su domicilio de la localidad de San Martín, zona norte del conurbano bonaerense. La joven y sus hijos fueron vistos por sobrevivientes en el centro clandestino "Automotores Orletti". Testigos del operativo afirmaron que el padre de los niños, Mario Roger Julien, fue asesinado en la puerta de la casa.
La familia de Victoria Eva Julien Grisonas
19759 de mayo
Nacimiento del/a nieto/a
197626 de septiembre
Desaparición del/a nieto/a
1979enero - diciembre
Fecha de localización
3Número de caso resuelto
“Desde los nueve años, cuando conocí mi identidad, me cambió la vida”
Víctimas del Plan Cóndor
Victoria nació el 16 de abril de 1945 en Argentina, aunque tiempo después obtuvo la nacionalidad uruguaya. Mario nació el 29 de abril de 1943 en Montevideo. Ambos militaron en la Organización Popular Revolucionaria 33 Orientales (OPR 33), en la Federación Anarquista Uruguaya (FAU) y en el Partido por la Victoria del Pueblo (PVP). Ella era dibujante, él obrero gráfico.
El hijo mayor de la pareja, Anatole, nació el 25 de septiembre de 1972 en Montevideo. Tras el golpe de Estado, la familia se refugió en la Argentina. Por lo investigado en los juicios por los delitos de lesa humanidad cometidos en Automotores Orletti y en el marco del Plan Cóndor, se supo que los niños pasaron unos 10 días en Orletti, hasta que fueron trasladados a Montevideo.
En la capital uruguaya se los vio en la sede del Servicio de Información de Defensa (SID), al cuidado de una embarazada detenida, María Claudia García Iruretagoyena de Gelman, quien también había estado en Orletti. Más tarde, fueron llevados en avión a Chile. En Valparaíso los abandonaron en la mañana del 22 de diciembre. El dueño de unos juegos infantiles, al advertir que estaban solos y no eran chilenos, informó a la policía. Los niños fueron a un orfanato y una jueza de menores tomó su caso.
“No pudimos crecer con nuestros padres, no los pude conocer, no tengo recuerdos de tocarlos, ni saber su voz, sólo retazos de gente que me habla de ellos con mucho cariño, y todos concuerdan en que eran personas honorables. Fue muy duro saber quiénes éramos, integrar una identidad y una familia nueva", afirma Victoria Eva.
“¿Por qué es importante recuperar la identidad? Porque empezás a unir un montón de cosas que, si no las hubieses sabido, pensabas que estabas loca. Recuperar mi identidad es haber conocido más a mis padres y también a mí”.
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