María de las Mercedes fue secuestrada el 26 de septiembre de 1978 cuando se encontraba embarazada de siete meses. Permaneció detenida en el centro clandestino "D2" que funcionó en el Departamento de Informaciones de la Policía de la provincia de Córdoba. El 11 de octubre comenzó el trabajo de parto y fue trasladada a la Maternidad Provincial donde dio a luz a una niña de la que fue separada inmediatamente. Pocos días después, debido a su deteriorado estado de salud, debió ser internada nuevamente y el 27 de noviembre fue trasladada a la cárcel del Buen Pastor hasta su liberación el 7 de abril de 1979.

Una vez en libertad, se dirigió a la Casa Cuna para recuperar a su hija, pero las monjas a cargo le negaron el acceso y cualquier información acerca de su paradero. Tampoco obtuvo respuestas de los juzgados de menores. Con otros tres niños y viuda, María de las Mercedes continuó el reclamó.

Años después, una de sus hijas conoció la existencia de la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (CONADI) y denunció allí lo que había padecido su madre, toda la familia sabía del robo de la niña. Fue entonces que pudieron incorporar las muestras al Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG).

Por otro lado, Abuelas de Plaza de Mayo se constituyó como querellante, y luego de una batalla judicial, la Cámara Federal de Apelaciones ordenó el entrecruzamiento. La joven accedió voluntariamente y el 26 de septiembre de 2012 el BNDG informó que era la hija de María de las Mercedes Moreno. La joven había sido inscripta como hija propia por una encargada del servicio social de la Casa Cuna cordobesa y su esposo, durante la dictadura.

Mercedes pudo encontrar a su hija y saber qué había pasado con ella, pero reestablecer el vínculo fue difícil. María de las Mercedes falleció esperando el comienzo del juicio por la apropiación de su hija. Seguiremos reclamando justicia. Abrazamos a toda la familia.