Nacida en 1925 en el barrio porteño de Núñez, de joven se casó con el escritor Héctor Germán Oesterheld, creador de El Eternauta, con quien tuvo cuatro hijas. Todas fueron desaparecidas por la dictadura, al igual que sus parejas y el propio Héctor. Dos de ellas, Marina y Diana, estaban embarazadas. A principios de los años 80, Elsa se integró a las Abuelas de Plaza de Mayo y fue una parte importante de la institución. Así como sus compañeras, supo transformar el dolor en lucha colectiva. Siempre amable y reflexiva, hasta su último día mantuvo la esperanza de encontrar a sus nietos o nietas.
"Hay que convencer a los jóvenes que la pelea continúa"
“Mi lucha de todos estos años es para que mis nietos sepan su verdad"