Las Abuelas de Plaza de Mayo comunicamos con hondo pesar el fallecimiento de la abuela Irma Rojas, gran compañera y luchadora incansable. Irma fue una de las primeras Abuelas de Plaza de Mayo, y formó parte de la Comisión Directiva de nuestra asociación, desempeñándose como vocal, cargo desde el cual trabajó con enorme energía durante muchísimos años.

La recordaremos siempre por su enorme fortaleza y su espíritu aguerrido. Su hijo, Horacio y su nuera, Rosa, fueron secuestrados por las Fuerzas Armadas de Seguridad el 13 de mayo de 1977, cuando Rosa cursaba su séptimo mes de embarazo. La pareja fue vista en el CCD \"El Vesubio\". Rosa fue llevada a dar a luz en su octavo mes de embarazo al Hospital Militar de Campo de Mayo donde se le practicó una cesárea. Luego del parto, fue devuelta al CCD \"El Vesubio\" donde pudo relatarle a una de sus compañeras de cautiverio que había tenido una niña a la que pensaba llamar María Luján. Los hijos mayores de la pareja, Cristian y Natalia, luego del secuestro de sus padres quedaron al cuidado de sus abuelos.

Irma trabajó sin descanso para encontrar a su hijo y a su nuera, y así fue que se unió primero a las madres, y luego se sumó a Abuelas. La búsqueda de su nieta nacida en cautiverio tuvo un final feliz cuando en 2007 pudo encontrarse con Belén Altamiranda Taranto, quien se había acercado a la filial de Abuelas en Córdoba en busca de su identidad.

“Soy una abuela feliz. Yo siempre digo que cuando cumplo años me levanto con una alegría y una felicidad, pienso ‘qué bueno, vivo, cumplo otro año más’. Porque a mí me gusta la vida, me gusta vivir, me gusta vivir para ver crecer a mis nietos a mis bisnietos, y a mis hijos envejecer junto conmigo”, decía Irma, y así la recordaremos, con mucho amor.

Sus restos serán velados en Sepelios Prado, Calle 845  N°2580, San Francisco Solano desde las 6 AM hasta las 15 PM, de mañana 5 de agosto.