Casos resueltos

El 26 de septiembre de 1978 María de las Mercedes fue secuestrada cuando se encontraba embarazada de siete meses. Permaneció detenida en el CCD "D2" que funcionó en el Departamento de Informaciones de la Policía de la provincia de Córdoba. El 11 de octubre comenzó el trabajo de parto y fue trasladada a la Maternidad Provincial donde dio a luz a una niña de la que fue separada inmediatamente. Pocos días después, debido a su deteriorado estado de salud, debió ser internada nuevamente y el 27 de noviembre fue trasladada a la cárcel del Buen Pastor hasta su liberación el 7 de abril de 1979. Una vez en libertad, se dirigió a la Casa Cuna para recuperar a su hija pero las monjas a cargo le negaron el acceso y cualquier tipo de información acerca de su paradero. Tampoco obtuvo respuestas de los juzgados de menores. Ante estas negativas, realizó la denuncia ante la Fiscalía Federal N° 3 de Córdoba y se comunicó con la CONADI dejando sus muestras de ADN en el BNDG. En 2011 realizó la denuncia ante la filial Córdoba de Abuelas de Plaza de Mayo y se constituyó como querellante ante el Juzgado Federal N° 3 a cargo del juez Alejandro Sánchez Freytes. El 7 de mayo de 2012, el juez se declaró incompetente por considerar que no se trataba de un delito de lesa humanidad. Así fue como la Cámara Federal de Apelaciones ordenó el entrecruzamiento de las muestras de sangre de María de las Mercedes con las de su presunta hija. La joven accedió voluntariamente a dejar sus muestras y el 26 de septiembre de 2012 el BNDG informó los resultados. La joven inscripta durante la dictadura como hija propia por una encargada del servicio social de la Casa Cuna cordobesa y su esposo, era la hija de María de las Mercedes.

Madre e hija pudieron reencontrarse.